Cuando el eje de la Tierra alcanza el máximo de su inclinación, posicionando la mitad norte más directamente hacia el sol, el Hemisferio Norte experimenta su solsticio de verano. Este acontecimiento astronómico, que suele producirse el 20 ó 21 de junio, significa el final de la primavera y el comienzo del verano. Para todos los lugares situados al norte del ecuador, supone el día más largo del año.
Este año, el solsticio se produce el 21 de junio, aproximadamente a las 3:42 h GMT. Simultáneamente, el Polo Norte entra en seis meses de luz diurna, mientras que el Polo Sur entra en seis meses de oscuridad.